EL MONTE DEL TEMPLO

La liberación del Monte del Templo: 1967 El lugar del Mikdash Carta de un Soldado El Kotel HaMaaravi Iom Ierushalaim por el Rabino Israel Ariel (video)
En  junio de 1967, durante la  Guerra de los Seis Días, el Rabino Israel Ariel fue un joven soldado en la brigada de paracaidistas, dirigida por el Gral. Motta Gur, que liberó la Ciudad Vieja de Jerusalem. El fue uno de los primeros soldados en alcanzar el Monte del Templo. La primera noche que el Monte de Templo volvió a la soberanía israelí, el Rabino Ariel fue asignado guardián del Domo de la Roca, el sitio mas sagrado del Templo. Rememorando ese momento, él nos relata esa experiencia única, universalmente para todos judíos y para él mismo personalmente: el regreso del pueblo judío a este lugar, el único lugar en la tierra que D-os ha escogido para El Mismo, para empezar la reanudación del servicio Divino. Verdaderamente, este momento fue la chispa para el nacimiento del Instituto del Templo. A continuación, presentamos fotografías tomadas durante y después de la conquista del Monte del Templo. Estas imágenes reflejan no sólo los acontecimientos que se desarrollaron en este lugar, sino que también imparten un sentido claro de la profundidad del momento en la historia de la nación de Israel:
Las tropas se apresuran hacia la Puerta de los Leones, que se dirige al Monte del Templo...
Se toman prisioneros...
Las tropas se toman un momento para descansar...
Protegiendo el Domo de la Roca: el sitio del lugar mas sagrado del Templo...
La reunión en el Kotel – el muro occidental - para expresar gratitud. De izquierda a derecha: El rabino Israel Ariel con el casco de combate), el Nazareno- HaRav David Cohen, y HaRav Tzvi Yehuda Kook.
El rabino Shlomo Goren lleva un Sefer Torá, y dirige una celebración espontánea en el Muro Occidental, como miles de Jerosolimitanos que, agobiados por la emoción, se dirigen al lugar donde se encontraba el Templo de Jerusalem.
El rabino Israel Ariel, herido en la cara, llevando la ametralladora de la compañía, en el Muro Occidental.
El rabino Shlomo Goren lleva un Sefer Torá, y dirige una celebración espontánea en el Muro Occidental, como miles de Jerosolimitanos, agobiados por la emoción, se dirigen al lugar donde se encontraba el Templo de Jerusalem.
El Sefer Torá se deja en un lugar seguro: un nicho en el Muro Occidental.